(Gotemburgo) Klaus y Marie amablemente me dieron agua fresca la semana pasada.

Por cierto, los dos tienen su apartamento en la ciudad de Gotemburgo y en verano están principalmente aquí en el área de conservación del paisaje en su pequeña cabaña de verano con el clima más hermoso.

De un viajero del año pasado, que conoce bastante bien Suecia, aprendí a equiparme siempre con agua dulce, diésel y gas licuado.

Cuanto más al norte se llega a Suecia, más solitario se vuelve. Y las distancias se hacen cada vez más largas hasta llegar de nuevo a la civilización.

Es por eso que Klaus, el simpático caballero en su hermosa casita de verano, me dio agua fresca de nuevo. MUCHAS GRACIAS.

Como pequeño regalo, mmm, gracias, había una moderna luz de lectura inalámbrica para la cama con un soporte dinámico de neodimio.

Me he acostumbrado a llevar pequeños regalos conmigo cuando viajo.

Aquí hay algunas fotos de la última ubicación.